10 mitos sobre la testosterona en la mujer: Adios miedo, Hola bienestar

La testosterona es una de las hormonas más relevantes en la salud femenina, pero también una de las más incomprendidas.
Si todavía n sabes por qué, te animo a ller mi post sobre “testosteroba y mujer…”.
Si ya lo conoces pero todavías dudas por todo aquello que se habla sobre ella, hoy te ayudo a desmontar los 10 mitos que persisten sobre la testosterona en la mujer basándome en la evidencia científica y en mi experiencia clínica de años de trabajo.

1. Mito: La testosterona es una hormona “masculina”

Realidad:
La testosterona es la hormona sexual activa más abundante en la mujer durante toda su vida, mucho más que los estrógenos. Es esencial para la energía, la fuerza, la masa muscular y la salud mental y física femenina

2. Mito: Solo sirve para el deseo sexual y la libido

Realidad:
La testosterona participa en la función sexual, pero también desempeña un papel fundamental en el estado de ánimo, la energía, el metabolismo, la salud ósea, la memoria y la función cognitiva. Sus beneficios van mucho más allá de la sexualidad

3. Mito: Masculiniza a las mujeres

Realidad:
Sólo dosis excesivas de testosterona pueden causar efectos masculinizantes. Las dosis adecuadas y personalizadas bajo supervisión médica no causan cambios de voz, vello facial excesivo ni otros efectos indeseados. Incluso, la testosterona fisiológica potencia la feminidad y el bienestar global

4. Mito: Causa ronquera y cambios en la voz

Realidad:
No existe evidencia de que la testosterona, en las dosis empleadas para terapia femenina, provoque cambios irreversibles en la voz.

5. Mito: Produce caída del cabello

Realidad:
La caída de cabello está relacionada con dosis altas de otros andrógenos, no con la testosterona fisiológica en terapia bien pautada. Incluso puede fortalecer el cabello en muchas mujeres tratadas correctamente

6. Mito: Tiene efectos negativos en el corazón

Realidad:
No existen pruebas de que la testosterona bioidéntica cause problemas cardiovasculares. De hecho, si tiene un efecto protector sobre el sistema cardiovascular en la mujer, mejorando la función y el bienestar

7. Mito: Daña el hígado

Realidad:
La testosterona administrada por vías no orales (implantes/pellets, gel, cremas, parches) no daña el hígado. Los problemas conocidos por la vía oral y derivados sintéticos no se observan con las formas actuales de terapia

8. Mito: Causa agresividad

Realidad:
La testosterona ayuda a estabilizar el ánimo y, bien regulada, tiende a reducir la ansiedad y la irritabilidad. No aumenta la agresividad en la mujer tratada conforme a estándares médicos

9. Mito: Aumenta el riesgo de cáncer de mama

Realidad:
La evidencia indica que la testosterona puede ejercer un efecto protector sobre la mama y no incrementa el riesgo de cáncer de mama cuando es indicada correctamente. Además puede contrarrestar el efecto proliferativo de los estrógenos y los últimos estudios a 15 años vista de la Dra Glaiser muestran una prevención de las recidivas en mujeres con cáncer de mama tratadas con testosterona

10. Mito: Su seguridad no está demostrada

Realidad:
La terapia con testosterona tiene una larga trayectoria clínica de más de 33años e n Estados Unidos y más de 11 años en España que demuestra su seguridad y beneficios cuando es aplicada por profesionales formados, con un seguimiento adecuado y dosis individualizadas

No permitas que los mitos te impidan sentirte bien.
Ven a consultarme tu caso y descubre cómo la terapia adecuada puede ayudarte a recuperar tu vitalidad y bienestar.

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